Ya regresé de la cita, aquí los pormenores.
Es un súper loser.
Primero que nada, de presencia, se veía normal, tirandole a cara de mezquino, chaparro, gordo, por lo menos sí tiene los 35 tacos que decía tener.
Bueno, pues de primera impresión no me gustó, y el tacaño pidió para él un café americano, y me preguntó si gustaba un café, y yo pedí un capuchino, y ya era hora de comer y no me ofreció comida... y ya era hora de la comida.
Luego súper negativo, el tonto es de guadalajara, y tiene 6 meses viviendo aquí y dice que no ha hecho amigos, y eso es por él, porque la gente de aquí es súper calida y el mismo día que llegas ya se hacen amigos, por como es la gente de aquí, cualquiera lo sabe, y él no dejaba de decir que su ciudad era mejor, que los restoranes de aquí que ninguno era bueno, que todos eran malos y que los chiles de aquí no picaban y que los fuegos artificiales de aquí no eran nada comparados con los de guadalajara, así toda la cita, bien tonto e infantil. Que si cuántos años tenía, que porqué no me he casado, que si cuándo fue la última vez que tenía novio, que si que buscaba...
Y aparte contestó una llamada teléfonica trivial y me dejó un rato así, y entonces le mandé un mensaje a mi hermano, que está bien grande, alto y fornido, que impresiona, y le dije, estoy en el café miró, ven.
Y mi hermano llegó y lo saludó, el otro se quedó asombradisímo porque no se lo esperaba, y le dije que ya me tenía que ir.
Que no duré ni una hora hablando con él, cuando ya me había caído bien gordo.
que bueno que me dijeron que viniera por mi, mi hermano al café, para que se asuste, aparte mi hermano me dijo que su saludo de manos era debilucho.