No es el lloro en sí
sino su comportamiento lo que tienes que mirar. El mio la noche que le dio se la pasó poniéndose boca abajo y apoyando una orejita y luego la otra sobre el colchón. Pobrecillo, que no sabía cómo quitarse ese dolor... Yo le ponia la mano sobre la orejita que tenía hacia arriba y se tranquilizaba un poco. Pensé en ponerle un poco de calor pero tan pequenyitos igual determinadas cosas no son tan buenas como pensamos.
Si te digo la verdad, es muy fácil verlo si te fijas bien.
Saludos,
Mar