Yo creo
que hay que llevar mucho cuidado con lo que se castiga, con lo que se amenaza, vamos. Yo parto de la base que si se dice se tiene que hacer sí o sí, de lo contrario el efecto en el niño es todo lo contrario.
Por lo tanto hay que castigar de manera consecuente, lo que no se puede decir es 'si no te lo comes los reyes no te traerán nada' porque sabemos de antemano que es un castigo que no vamos a cumplir!
Es mucho más efectivo, 'si no comes apago la televisión' porque es algo que estamos seguros que vamos a cumplir.
Yo también tengo el caso de mis cuñaos, que se pasan tooooooooooooooodo el día amenazándolos con 'posibles castigos' que jamás cumplen, resultado: LOS NIÑOS HACEN LO QUE LES DE LA GANA.