A lo mejor es una tontería, pero cada vez que saco o meto al niño de la silla de paseo me pregunto si a lo mejor me estoy pasando. Donde yo vivo hace mucho frío, así que compré para la silla de jané el saco polar. El problema está en que con toda la ropa de invierno, con cazadora (que abulta más que el bebé de doce meses), el saco polar y la barra de seguridad, pues es casi imposible que quepa, aparte de lo embutido que va el niño. ¿Cómo lo haceis vosotras?