Quiero compartir con todas vosotras el momento más dulce, intenso, emocionante... qué he vivido jamás: el nacimiento de mi hija ( qué raro me suena hija).
Pues bien, aunque me enteré de mi embarazo a primeros de septiembre todo empieza unos meses antes con su búsqueda y con un aborto anterior que no sé porque creo que la pérdida de esa criatura de alguna manera posibilitó que viniera al mundo Henar y como mínimo creo que se merece una línea.
Al lío, después de un embarazo con pérdidas, vómitos, ardores etc... y sobretodo miedos al principio llegó el día el día 16 de mayo.
Ya levaba desde el 11 cumplida y no había ningún síntoma de que me parto se acercaba, pero después de comer me empecé a encontrar un poco inquieta y sobre las 8 y media tuve mi primera contracción incluso me hizo gracia mira ya sé lo que es una contracción a los 10 minutos otra y junto con mi pareja, que fue el mejor apoyo que pude tener, empezamos a apuntarlas, enseguida fueron regulares pero cada 6 o 7 minutos, yo esperaba a que fueran cada 5 minutos y recordaba que mi gine me dijo que aguantar en casa que así no se me haría tan pesado.
Nunca imaginé estar tan tranquila ya sabía que no quedaba mucho, cenamos, nos duchamos y a las 12 menos cuarto llegabamos al hospi la comadrona me dijo uy tú vienes muy sonriente a ver si estás o no de parto, en realidad era la emoción que sentía y que me hacía tener la piel de gallina.
Ya estaba dilatada de 4 centímetros y monitorizada las contracciones eran bastante dolorosas, me pusieron la epi, me rompieron la bolsa y la dilatación fué muy rápido, llegó mi gine y me dijo que vamos a sacarla, y ahí me entró un no sé que, fuimos a quirófano dos empujones al ver que la niña no salía, un pequeño corte y dos empujones más y después el SUMMUM DE LA FELICIDAD!!!!
Qué subidón una niña de 3,400 kilos preciosa, perfecta, fruto del amor y su papá a mi lado no lloré, no podía era tanta la emoción que sólo podía mirarla. Chicas es ahora cuando me emociono, qué momento tan mágico.
Os deseo a todas un parto tan buen como el mío o mejor.
Y recordad el parto no es el final sino el principio!
