Te pueden pasar algunas o muchas de las siguientes cosas:
- Perder el trabajo o dinero sin sentido.
- Tener problemas permanentes en tu hogar.
- No conseguir establecer ningún tipo de relación estable.
- Tener frecuentes problemas de salud.
- Distanciamiento de amigos y familiares sin razón.
- Ser agredido.
- Obsesionarse por ciertas cosas sin poder controlarlo.
- Dolores de espalda, cuello, cabeza... Adormecimiento de manos o pies.
- Tener pesadillas frecuentemente.
- No tener ganas de comer y/o bajar mucho de peso.