Fácil no es.
Yo me he vuelto loca por varios acuarios en mi vida. Ninguno de ellos se enamoró de mi.
Me atraen un montón. Los disfruto. Me gustan. Pero ahora ya no me los tomo tan en serio, ni pienso a largo plazo con ellos.
Son relaciones bonitas e intensas, pero a menudo cortas.
Personalmente me parecen extraterrestres. Creo que en lugar de tratar de entenderlos vale más aceptarlos como son.
PD: Pobre librano, a estas alturas y aún creyendo en el príncipe azul.