Poema Inmortal
Civilización sumeria, a la cual pertenecí en tiempos remotos, desde que en aquélla constelación Aquarius divise con mis propios ojos sus cincuenta y seis estrellas incandescentes de luz y claridad, alcé mis manos al cielo y grité, a todo pulmón al dios An, para que derramase sobre mi cabeza el agua de inmortalidad, tan eterna como su nebulosa de diez mil seiscientos años.
Constelación poderosa, de cuyo hijo favorito Ganímedes hiciste el primer mortal servidor de los dioses, vierte en las consciencias el agua eterna de sabiduría a fin de alcanzar luz inmortal.
Una voz, semejante a un grito de guerra susurró a mi alma envejecida, ¡levantad la vista,divisa el velo nocturno!, observad ,aquella nebulosa Helice , ese polvo de estrellas no es mas que tus hermanos acuario unidos en uno solo por toda la eternidad, cuyas vidas abajo, en medio de su pequeñez y limitaciones, llevaron a la humanidad el mensaje a pulmón vivo: LIBERTAD,LEALTAD,VERDAD! Que no se cierren tus pupilas- susurró de nuevo la voz, acaso no ves que la constelación Aquarius es la más extensa? Allí viven todos, aguardando por ti, pero es tu deber llevar el mensaje de evolución personal, para cortar esta rueda kármica que tantas penas te han devenido.
Acto seguido la voz desapareció