¡Hola compañeros!
Hoy me he despertado con ganas de desearos un feliz día. La razón: pues porque no hacen falta razones para empezar la jornada con buenas energías.
Me gustaría que pensarais que al menos aquí, tan cercanas o lejanas como pueden ser las ondas wifi, hay una persona que os regala una sonrisa y un guiño, que espera que pongáis todos los ingredientes para que éste y muchos más sean unos comienzos felices.
Sé que mi mensaje no arreglará problemas, pero desearía que os tomarais unos instantes para deciros vosotros mismos que vais a sacar jugo a este nuevo amanecer y que os veis preciosos!
Espero que cuando salgais hoy de casa la única enfermedad que os persiga sea una sonrisa crónica y se la contagiéis a cualquiera con quien os crucéis.
Abrazos desde esta habitación que marca las 8.30 hora española