Mi hijo de tres años y medio siempre ha comido muy bien. Hace unos diez dias estaba comiendo y de pronto se clavo una espinita pequeña,pero vamos le di migajas de pan y se le paso. La cuestión es que de pronto cada vez que va a comer alimentos sólidos el niño dice que tienen espinas y que le duele. Al principio no le di mucha importancia, pero ya han pasado bastantes días y el niño cada vez que va a comer me pregunta si tiene espinas y se niega a comer solo quiere leche y zumos. Lo he llevado al pediatra y al otorrino para asegurarme que verdaderamente no tiene nada en la garganta, y efectivamente no tiene nada pero sigue sin comer.
Hoy mismo a la hora del almuerzo cuando ha visto la comida se ha puesto a llorar y a gritar que no quiere comida. Yo estoy desesperada. Me gustaría mucho que me dieseis vuestra opinion o si os ha pasado algo parecido.
Muchas gracias