Según los familiares...
El papá se gastaba el dinero en máquinas tragaperras, en las que llegaba a gastarde hasta 500 euros algunas veces, dicho por testigos que había en los bares. Éstos le preguntaban por sus hijos y él contestaba, que sus suegros les mandaban 600 euros al mes. Cosa que es mentira. En cambio a él no le faltaba el dinero para tabaco, y sólo aparecía por casa cuando quería sexo, luego desaparecía, decía que a trabajar, pero se la pasaba metido en los bares practicando su deporte favorito, las máquinas. Y mientras sus hijos muriendo de hambre. Su mujer que solía pesar más de 100 kilos, ahora pesaba menos de 60...
Lo he escuchado en el programa de Ana R. Quintana.